La obligación primordial de todo trabajador, según la cual debe guardar rigurosamente la moral en las relaciones con sus superiores y compañeros, debe preservarse en todo lugar, sobre todo para asuntos relacionados con la relación laboral . Por ello, la violación grave de esta obligación constituye una justa causa de terminación del contrato de trabajo.
El pacto contenido en las cláusulas adicionales de los contratos de trabajo, no tenía ninguna validez, al tratar de restarle los efectos propios de un pago retributivo.
Los empleadores tienen la obligación de conservar la información laboral de sus trabajadores de manera indefinida, «asegurando que ella sea veraz, cierta, clara, precisa y completa.“
Se estudió un caso en el que una empleada doméstica prestaba sus servicios a varios empleadores, pero solo una de esas personas era quien realizaba aportes al sistema de seguridad social.
Le corresponde a la AFP actuar con solidaridad y costear las incapacidades con las cuales el afectado pueda satisfacer sus necesidades básicas, hasta tanto se decida en forma definitiva el reconocimiento y pago de su pensión de invalidez.