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Un activo se debe depreciar, aunque no se esté usando, a menos que, el método de depreciación esté basado en el uso que se le da al activo.
Es común encontrar en las entidades que el método de depreciación más utilizado para reflejar el uso de un activo es el método lineal. El método lineal distribuye el “desgaste” del activo de forma constante durante un periodo de tiempo que se espera usar el mismo.
Este método por supuesto es muy acertado, si la forma de usar un activo (patrón al cual se espera que sean consumidos los beneficios económicos futuros del activo) es de manera constante a lo largo del periodo contable, de igual manera, cuando el desgaste del activo es constante sin depender de su uso (por ejemplo una malla, un cerramiento, una edificación).
Dadas las circunstancias actuales de cierres temporales de oficinas, fábricas, locales comerciales, la pregunta básica no consiste en establecer si la depreciación puede ser retirada para no generar mayores pérdidas o gastos del ejercicio, sino en preguntarnos, en el caso de los activos que tienen como método el lineal, si su desgaste sigue presentándose de manera constante pese a que se encuentren sin usarse.
Así las cosas, al final del ejercicio (31 de diciembre del 2020 en este caso), resulta imperioso para las entidades preguntarse si el método lineal sigue siendo el método apropiado para depreciar. En muchos casos la respuesta será negativa, puesto que las máquinas en su mayoría, equipos muebles y otros, durante el tiempo que estuvieron sin uso, no sufrieron desgaste alguno.
Así las cosas, sería necesario, cambiar el método lineal por otro método basado en el uso (horas mano de obra, horas máquina, días laborados, entre otros) por lo menos para el año 2020. La norma aclara que es un cambio de estimación que debe ser revelada en los estados financieros pero no requiere reexpresión de estados financieros y mucho menos constituye un error. En periodos posteriores, si la operación de dichos activos vuelve a ser constante, la entidad deberá analizar el método que mejor refleje el patrón de
consumo de los beneficios futuros para dar continuidad al método en función del uso, o volver como se hacía inicialmente con el método lineal.
Fuente: Gil Gómez & Cía. s.a.s. Depreciación activos sin uso COVID-19. Ampliar Información |