En respuesta a la consulta planteada sobre el tratamiento contable en casos de errores en la depreciación de activos fijos y la eventual baja de estos, se debe tener en cuenta lo siguiente:
Errores contables en la depreciación y su tratamiento:
- Identificación de errores: Cuando se detecta que los activos fijos han sido depreciados en exceso debido a errores del software o del proceso de carga de datos, resultando en mayores valores de depreciación que incluso pueden ocasionar saldos negativos en el valor contable de los activos, esto se considera un error contable.
- Normatividad aplicable: De acuerdo con la NIC 8 (para NIIF plenas) o la Sección 10 (para NIIF para PYMES), los errores contables deben corregirse de manera retroactiva, siempre que sea posible. Esto implica que la información financiera de los períodos anteriores debe reexpresarse para reflejar los ajustes pertinentes. En caso de que no sea posible aplicar una corrección retroactiva, se hará de forma prospectiva desde el momento en que se detecta el error.
- Depreciación y baja de activos: Cuando se va a dar de baja un activo fijo que ha sido objeto de mayor depreciación debido a un error, el saldo negativo no puede mantenerse en los estados financieros. Se debe ajustar el valor en libros del activo a cero antes de su baja, corrigiendo el error en los estados financieros, bien sea reexpresando los períodos anteriores o realizando los ajustes en el período corriente si no es posible hacerlo de forma retroactiva.
- Tratamiento contable: En cuanto al tratamiento de la corrección del error, no se trata como un ingreso por «recuperación de deducciones». En lugar de eso, la corrección del error debe reflejarse de acuerdo con las políticas contables que maneje la entidad y con base en lo establecido en la normatividad aplicable (NIC 8 o Sección 10 de NIIF para PYMES), ajustando los saldos incorrectos y reflejando la depreciación correcta del activo.
Conclusión: El tratamiento contable de un mayor valor depreciado por error debe hacerse mediante la corrección de los saldos afectados en los estados financieros, preferiblemente de forma retroactiva, sin que esto genere un ingreso por «recuperación de deducciones». En caso de baja del activo, se deben corregir los errores antes de proceder, eliminando los saldos negativos y ajustando el valor en libros del activo.